martes, 8 de diciembre de 2015

Ariel.

Dicen que en el mar, 
la vida es más sabrosa.


Ariel era el pez más pequeño del arrecife. Todas las mañanas despertaba con la inquietud de conocer más: todo el océano podría conocer, si acaso sus padres lo dejaran hacer nada, es decir nadar. Sus amigos contaban sobre los peligros del infinito; en todo ese universo existían bestias feroces capaz de devorar sin piedad. Pero toda esa palabrería no limitaban la curiosidad del pequeño pez

 


-¡Es muy peligroso salir del arrecife!- decían.

Pero a Ariel no le importaba; así que, poco a poco fue juntando  un grupo de valientes peces para la exploración. El primer plan era conocer las fronteras del hogar.

Luego, sin avisar a sus padres... Ariel y el grupo se lanzarían a las puertas principales. ¡Plan de fuga! 

Y comenzar el viaje por los siete mares.

Ariel salió entonces a la aventura junto a sus mejores amigos. Descubrieron las corrientes marinas más importantes; el origen de las tormentas, los vórtices submarinos y los abismos encontrados en la oscuridad del planeta. Aprendieron sobre los distintos tipos de mareas: las vivas y las muertas. Comprendieron también el porqué se formaban los huracanes: entonces el cielo seducía al mar con sus rayos.


Después de un tiempo volvieron. Ya no eran unos peces pequeños. Habían crecido. Al regresar, amaron a su arrecife, más que a otra cosa.

Fin.

martes, 1 de diciembre de 2015

Cisnes

Durante la primavera, varios cisnes viajan a Ikkala y se deleitan de sus lagos...


Todo el grupo de aves estaba fascinado con el agua; nadaban, jugaban, volaban alrededor. Pero había un cisne que simplemente no lo hacía.

Dormía y dormía durante todo el día.

Llegó el verano y los cisnes empezaban a juntarse para planear nuevas crías.

Luego llegaron los días de lluvia.

Pero el cisne no se movía, ni salía.

El grupo no entendía lo que pasaba con ese cisne. Cuando uno de ellos se acercó hacia este cisne, descubrió que era una linda hembra.

-¿Por qué te guardas aquí? Eres tan bella.



De pronto el cisne adormilado, se levantó. Tenía un ala herida. 

Contó al animal preguntón de donde venía, su vida en cautiverio, como había logrado escapar del zoológico y el porqué deseaba descansar por lo menos unos días; antes de que volviera el invierno.

-Comprendo. Pero, la vida continúa; ven, vamos con el  doctor castor para que él te sane-.

Fueron. Ahí, el cisne contó toda su aventura, desde que lo habían creado unos patos, hasta cuando escapó por la puertecilla del zoológico y voló desde Saint-Aignan hasta allí. 

-La herida del ala sucedió en Hamburgo. Cuando unos cazadores quisieron que yo fuera su mejor premio. Yo lo considero sólo como un efecto secundario de todo el viaje.-

-Te recuperarás pronto. Eso es seguro. Que bueno que has descansado-.

-Y ¿qué pasará con las demás aves del zoológico?-

-No lo sé. Ellos me vieron salir, así que cada quien buscará su propia libertad. Creo.-

-Mientras, yo te cuidaré. Para que luego continúes con tu vuelo, así sin miedos ni heridas.-

-¡Gracias!-

Luego, el doctor castor le vendó el ala para que se recuperará pronto.

Resultado de imagen para dibujo cisne

martes, 24 de noviembre de 2015

Helga.

Helga era una niña seria, ensimismada y a la pobre todo le pasaba...

Un martes, mientras comía su tradicional sándwich de jamón con pepinillos una pelota se acercó a sus pies. 

-¿Puedes pasarla?- Le dijo Alfonso. 

Ella intentó patearla, pero desde su lugar -sentada en la banca de concreto- y con el emparedado en la mano, no pudo. Así que se tropezó, para luego caer en un pequeño charco de lodo. Ella se enrojeció como jitomate. Las burlas florecieron por todo el patio. 

Alfonso se acercó, fue por la pelota y al ver el almuerzo tirado de Helga, lo levantó. Quitó de él la tierra y se lo devolvió. 

     -No sabía que no sabes patear una pelota. Si quieres, luego te enseño.-

Y se fue. 

Helga estaba muy apenada. Cuando llegó a casa le preguntaron por sus calcetas tan sucias. 

-Nada. Sólo una caída. Todo está bien.-

A la semana siguiente, como cada lunes, se hacía el ahorro escolar. Cada alumno inscrito llevaba el monto que quisiera y al final de año se le daba la cantidad recaudada; esto con el fin de fomentar el ahorro en los pequeños. 

Pues, sucedió que al volver del recreo, la maestra no encontró el monto recaudado del día. Esta situación, creo una alarma en todo el salón.

-Niños. Quiero saber si alguien entró al salón durante el recreo.- dijo la maestra, severamente.

-Yo maestra, olvidé mi emparedado y vine por él.- dijo Helga.

-¡Eres una ladrona! Además cínica; mira que robarle a todo el grupo... Acompáñame a la dirección. Yahaira, cuidarás al grupo.-

-Pero, ¿por qué, maestra? Dígame que hice.-

-No vengas con amnesias. Tú sabes lo que hiciste. Llegaste y robaste el ahorro semanal del grupo que estaba en mi cajón.-

-Pero, maestra. Yo no lo hice.-

-Ahora resulta que no lo hiciste... ¡Ven, te voy a llevar con la directora!-

-¡Pero yo no lo hice!-

-Vamos.-

Helga lloraba y se resistió al principio, luego; no le quedó más que ir con su maestra a la Dirección. Ahí llamarían a su casa, para dar noticia de la barbaridad que había sucedido y... la suspenderían.

Alfonso llegó a la dirección. La madre de Helga ya estaba ahí, y la tunda entre las tres autoridades se estaba llevando a cabo.

-¿Qué pasó Alfonso?-

-Tengo que confesar algo; Helga no robó el dinero. -

-¡¿Qué?!-

-¿Ah no? Entonces, ¿quién lo hizo? -

Alfonso callaba.

-Di algo muchacho. Si no, ¿a qué has venido?-

-No soy un chismoso. Sólo les digo que Helga no fue.-

-Mira Alfonso, esta acción que pasó es un delito grave que hasta a quien lo cometió se lo pueden llevar a la cárcel. No se trata de que si eres "Chismoso". Se trata de corregir errores desde ahorita para que no se vuelva a cometer en un futuro. Al no decirlo tú te estás convirtiendo en cómplice porque sabes la verdad y no la dices. ¿quieres que castiguemos a Helga? Ella es la presunta culpable, ya que confesó haber entrado al salón en horarios no establecidos.- 

-¡No, ella no fue! me cae bien, es honesta y me gustan sus mejillas rosadas.-

-Ah, bueno; entonces... dinos la verdad.-

-Pero es que luego, me dirán chismoso y me golpearán.-

-¿Quienes?

-Los que robaron el dinero.

-No te preocupes. Haremos un trato. Mira, todos en el salón creen que saliste al baño, y creen que pensamos de Helga que es la culpable. Dinos los nombres, investigaremos a fondo y la próxima semana veremos si caen de nuevo en la mala acción. ¿Te parece? 

-Me parece estupendo; mientras tanto... ¿qué pasará con Helga y ellos?.-

-Helga se tomará el día. Y de ellos tú no te apures, sólo dinos los nombres.

-Bueno.

-Gracias por colaborar y por tu honestidad.-

-Y bueno, ya vete de aquí. ¿Qué tanto tiempo tardas en ir al baño?

-Sí, maestra. Me han quitado un peso de encima.

-Tú solito. Le hiciste caso a tu conciencia y ésta te ha liberado-.

-Adiós.

Alfonso fue al baño, se lavó las manos y al regresar; la maestra ya estaba en el salón.

-Pero, ¿quién te dejó salir? muchacho travieso. Siéntate ya.

El lugar de Helga estaba vacío. Pepe, le comentó que la habían suspendido. Cuando regresó la mirada a la maestra, ella le guiñó el ojo. 

Todo saldría bien.

martes, 17 de noviembre de 2015

El Juego.

Resultado de imagen para parque, tierra, cachorros corriendo

Los cachorros escuchaban atentos las instrucciones:

-Si quieren conseguir la hoja de la sabiduría deben correr hacia el árbol más alto del parque, dar vueltas a su derrededor hasta que sus giros le produzcan mareos y éste comience a hablar; entonces les dirá una frase distinta a cada uno. ¡Vayan!

¿Ya tienen su frase? ¡No me la digan! Ahora, tendrán que ir a la antorcha de luz y tomarán un palito de madera, con el cual dibujaran una casa; la casa de sus sueños, ¿porque tan chica? Tienen todo el suelo como lienzo, ¡no hay límites para la creación! 

¡Mírense ahora! Hasta que los veo sonreír verdaderamente." 

Los cachorros se reían entre ellos y daban vueltas por el suelo.

"Mmm... ¿en verdad quieren la hoja de la sabiduría? 

Resultado de imagen para hoja de otoño

Bueno, pues entonces vamos todos a la cima del monte de la diversión y ustedes deberán escalarlo por el resbaloso sendero.

Muy bien cachorros. Y bien, ¿cuál es tu nombre?"

-no sé-

-Perfecto, No sé. Aquí tienes tu hoja de la Sabiduría. Que esta hoja te acompañe en los lugares más oscuros y tenebrosos; te proteja de zombies y de monstruos debajo de la cama y te cuide.

-Perfecto, porque pepe le tiene mucho miedo a los zombies que se vayan a comer sus sesos y yo no quiero que me de miedo eso.-

Con esta hoja, ya no más.

-Gracias-. 

Y tú, Padme. Aquí tienes tu hoja de la sabiduría. De igual modo, que esta hoja te acompañe en los lugares tenebrosos. Para que no tengas miedos. 

-Yo no tengo miedo-

Muy bien cachorrillos; pues ya lo saben. Siempre que esten dudodos o temerosos, pueden venir aquí. Estos árboles les daran las hojas de sabiduría que necesiten para los tiempos de temor. Bueno, es hora de irme.

¡Adios!

Y dicen que los cachorros dejaron de tener miedo. 


martes, 10 de noviembre de 2015

Leoncio


Resultado de imagen para leon cachorro

Ronroneos: el pequeño león apenas despierta. Luego se despereza, corre por la pradera; se encuentra con Yaguarete, Ocelotl  y los tres van juntos a cazar mariposas; su pasatiempo favorito.

Al anochecer regresan a casa de Leoncio. Su padre le reprende frente a sus amigos; 

¡¿por qué tan tarde, por qué tan sucio, por qué tan irresponsable?! 

Ese es el cuento de nunca  acabar. Y así lo será porque Leoncio no dejará de jugar. 

A las mariposas les gusta que Leoncio y sus amigos les visiten. Cada tarde pintan sus alas de diferentes colores y aconsejan a las orugas para que se tejan unas alas grandes y bellas. Como la vida de las mariposas es muy corta, han pasado varias generaciones durante la vida del pequeño Leoncio; es muy conocido entre ellas porque entre todas se van contando las travesuras de este feroz amiguito.

A Leoncio le encantaría coleccionar mariposas; pero le da una terrible tristeza el sólo hecho de pensar que, al atrapar una pequeña fierecilla ella dejará de volar. Por eso, solo las alcanza y las suelta. ¡Es tan corta su vida! Que lo mejor es jugar. 

Cada día Leoncio hace nuevas amistades y ama a las mariposas; la  belleza de sus alas y el poder de la libertad al vuelo.

Al día siguiente ha vuelto él y sus amigos; "Pero ¡que colores tan únicos! Dice al ver un peculiar bichito.

Resultado de imagen para mariposa y colores

Leoncio decidió pasar toda la tarde jugando con una mariposa de corazones pintados en sus alas.

Ya anochece; Leoncio y sus amigos tienen que volver a casa. 

-Mari, ¿te volveré a ver?

-Eso espero, Leoncito amigo. 

Dice la mariposa mientras posa alegre sobre su nariz. 

-Acompáname a casa, quédate a vivir conmigo. 

-Si mañana regresas, volveré contigo a donde quieras. 

-¿Lo prometes?

-Lo aseguro.

-Perfecto.

Mientras el sol se metía por el horizonte, los tres amigos regresaban alegremente a casa: 

-Y ¿podrás encontrarla de nuevo entre tantas mariposas?

-Claro. 

-¿Cómo podrás hacerlo?

-Ella me encontrará a mi. Y luego, yo podré reconocerla. 

-Ja, ja, ja. Y para que quieres que vaya contigo a todos lados, ¿una mariposa, que solo puede vivir tres días?

-Porque yo la cuidaré. Y quien sabe, tal vez, duré tres estaciones, o más.

-Te dirán el león mariposón de la jauría.

-No me importa.

-Ya no somos tan cachorritos Leoncio; las burlas pesan.

-Esa mariposa ha puesto mucho color en  mi vida, ha dado alas a mis sueños...

-Bueno, yo los dejo... me tengo que  ir con mi manada. -Se fue Yaguarete.

De vuelta a su jauría; Leoncio mira las estrellas antes de dormir. Sueña con su mariposa. 

-Quien fuera ella para alcanzar las estrellas...-dice, luego bosteza y cierra los ojos para dormir.



martes, 3 de noviembre de 2015

Una mariposa.

Para Ángela.


¿Has visto alguna vez una mariposa con el ala rota?
¿Te has preguntado que pasa con estas criaturitas?


He aquí esta breve historia...


  

La pequeña angelita recién había llegado desde el cielo. Era su tercer día en la tierra y su espíritu inquieto no daba cábida a tantas cosas nuevas por conocer. Su bella madre consentía toda curiosidad de la niña. 

Una noche en que Angelita se disponía a dormir:

-Mamá, ¿cómo hacen las aves para volar? 

-Pues con sus alas. 

-¿Como los ángeles? 

-Exacto. 

-Mami, si las mariposas no tienen plumas... ¿cómo pueden volar? 

-Pues porque ellas son muy ligeritas, Ángelita y ya; duérmete. Porque con tanta pregunta nos va a llegar el amanecer. 

-Mami, si a una mariposa se le rompen sus alas, ¿crees que pueda volver a volar? 

-Probablemente llegué el reparador de alas y le sane su herida. Mientras tanto duerme tranquila con El Reparador de Sueños. Y cuando vea una mariposa le preguntaré. Ángela, ya duerme... 



-Está bien, mamita. Buenas noches. Te quiero... Mañana, ¿me vas a llevar al parque para buscar mariposas? 

-...Sí, Ángela. 

-Gracias, mamita. Buenas noches.

Al día siguiente, fueron al parque y encontraron a una pobre criatura con el ala rota.

-¡Mamá! Justo lo que ayer platicábamos. 


La pobre mariposa estaba descompuesta, con su ala rota. Imposible intentar volver a volar.


-Ni modo Angelita, pronto algunas hormigas se darán cuenta y se la llevarán para cenarla. 

-Es que no, madre. Esta mariposa no debía de ser maltratada. Estoy segura. 

-Y ¿porqué estás tan segura? Es el ciclo de la vida, de la naturaleza, de la cadena alimenticia. Vente, vámonos.

-No, madre. A esta mariposa alguien le hizo daño. Y nuestra naturaleza como ángeles es ayudar. 

La angelita se cortó un trozo de sus alas. 

-¡Auch!!! Mariposita; ten. Te regalo un trozo de mis alas; sus plumas son mágicas. Poco a poco sentirás que tu propia ala estará sanando. Vuela, ¡Vuela mariposita bonita! Se libre y viaja hasta donde te espera tu familia. 

La mariposa hizo un gesto de agradecimiento y luego salió volando rumbo al sur. Por otra parte, la madre de Ángela sólo reía.

-¡Ay Ángela, estás bien loquilla! Vámonos, que se hace tarde.

Y ambos ángeles siguieron su rumbo.


martes, 13 de octubre de 2015

El caminante.


Resultado de imagen para la tortuga, parque, hormigas En el parque siempre pasa una tortuga, su caparazón tiene varias raspaduras. Es una tortuga silenciosa y pocos saben de su vida.
    Yo le veo andar por ahí; lleva una banda en la cabeza, supongo que es para el sudor. Sé que mi canto le agrada, pues cada que pasa por donde estoy baja el ritmo de sus pasos y sonríe para sí. Es una sonrisa muy discreta; de su vida pocos sabrán lo que pasó.






Mi madre ha llegado y me regaña por andar fuera; ¿y la tarea? me pregunta. Pero es que no sabe todo lo que pasa acá. Además de intrigarme la misteriosa vida del señor tortuga, quisiera saber porque las hormigas nunca descansan. ¡Vaya, deberían de tomarse cinco minutos en el día! Y, la forma en como juegan los perros, son tan inquietos.

-¡Que te metas, te digo! ¿Qué tanto te interesa la vida de los demás?

Mamá ahora sí está furiosa. Le molesta sobretodo el famoso dicho que se generó: "me lo dijo un pajarito" por culpa de la tía pía.

Resultado de imagen para pajaritos

martes, 6 de octubre de 2015

Wendy

Por las tardes, la escuela abre sus puertas para que la maestra Wendy cuente cuentos a los alumnos. Ese taller está abierto al público en general. A la maestra le gusta acomodarse en el patio, a la sombra de una palmera donde puede verse el mar:



“Allá en el horizonte; donde dicen que está la utopía se encuentra el cielo.” 



Wendy dice a los pequeños;

-Miren hacia el horizonte. ¿Se han fijado como entre el cielo y el mar no hay distinciones? Son un reflejo casi de lo mismo; olas y nubes, aves y peces. Magia. Y el horizonte es el lugar en donde todo esto sucede: las ballenas pueden volar y gaviotas se sumergen hacia las profundidades del océano. Porque ¡allá todo es posible! 
Los peces vuelan y se convierten en constelaciones los cangrejos y tortugas.


-¡Orale! Que maravilla. Entonces yo quiero ser bueno, pelear por la justicia y luchar contra algún canalla que quiera ir en contra de todo esto.

-Excelente Conejo. Ahora cierren sus ojos-.

-No veo nada-. Decía la mofeta.

-No... no quiero que cierren sus párpados y nublen la mente. Cierren sus ojos pero miren para dentro de sí mismos. ¿Que ven? ¿Siguen viendo “nada”? 

-Veo puntitos... Veo mis ojos... Veo luces... -



-Cierto. Poco a poco ustedes verán el universo que existe dentro de ustedes mismos. Se dice que “Dios creo al hombre a su imagen y semejanza…” y todos creyeron que Dios era igual que un ser humano. Los griegos pintaron a Zeus, los nórdicos crearon a Odín; y sin embargo Dios era algo más que un simple ser humano, algo más poderoso. 


El zorrillo preguntó: -Cuando miré para adentro pude ver estrellas como se ven en el cielo nocturno-

-Exacto. Y cuando pensamos: generamos una lluvia de ideas; nos enojamos y relampagueamos. Nuestro estómago es un volcán, deshace todo lo que comemos; las venas son ríos que circulan por todo el cuerpo; nuestro cabello es selva; los bosques y selvas son pulmones.
-¡Y mira!- gritaron los mapaches mientras se subían a un enorme árbol. –Este árbol es un planeta en miniatura para estas hormigas.

-Sí, en este mundo existen un montón de munditos. Este planeta es un universo lleno de diversidades
-Tienes razón Wendy. ¡Es un universo y hay un planeta en mí!- decía ozesno. Y ahorita quiere dormir… Bostezaba.

-Por eso debemos cuidarlo.-

-¡A nuestro cuerpo y a nuestro planeta.!-

-Definitivamente.-

Y todos los cachorros salían contentos para luego volver a casa con su familia. 

Construían sueños para mejorar cada mundito que se formaba en la Inmensidad.

...shhh... 

Ya duermen todos... 

martes, 29 de septiembre de 2015

La loba estrellada

Con colaboración de Harry El Pato.

No todo en Zoonoetina es pavimento. 

Te lo digo, la ciudad es por mayoría vegetación. Sus habitantes son conscientes sobre la vida de cada individuo, inclusive del ser enorme llamado planeta. Varios monos han discutido sobre su existencia, allá por el parque "Mileto, paleto" se ponen a discutir si el viento que atraviesa entre las ramas es acaso su respiración. O si se enojó la otra vez, porque la tormenta eléctrica estuvo espantosa; causó el incendio más temible que hayan presenciado los habitantes. 

Afortunadamente, el equipo de elefantes bomberos pudo hacer algo al respecto.
 "¡ja! ¿cómo ves, ser menso inmenso?" yo dije cuando vi el incendio apagado. Pero mi madre, me regañó: -¡No ofendas al ser que te hospeda en su casa!- Y me sentí tan mal, que me quedé sin ganas de jugar.



Resultado de imagen para lobo mexicano
Luego de estar meditando sobre la vida de las plantas, la tierra, el sol, las nubes llegó mi amiga mariposa: 

-¡Ven Luciana! Vamos a correr y a volar. ¡Alcánzame!
Y así pasamos toda la tarde jugando. Corríamos por las montañas, el valle, jugábamos a las escondidas (a ella se le facilitaba más perderse en las hojarascas de otoño) y platicábamos un poco sobre la clase del maestro búho testarudo. 

A la hora de la cena, mamá llamó para reunir a todos los lobos. 

Me despedí de Luciana y volví con mi manada.  Rómulo y Remo son los hermanos más extraños que tengo, ¡no tienen pelos! Pero mi mamá a todos nos quiere por igual. 

 Una vez se perdieron y mamá aullaba por todos lados. Mi mariposa me dijo que los había visto jugando en la cascada; así que corrí a decirle a mamá. Ella salió fugaz y ahí estaban. ¡Esas traviesas criaturas! ¡Regalos divinos! Mi madre se asustó pero al finellos  estaban con nosotros. Yo creo que mi madre es maravillosa. Además estoy fascinada con mis hermanitos para cuidar. ¡Los quiero tanto!


Mamá nos abraza y canta una nana para dormir; tengo sueño. Mañana que vaya a la escuela... ¡Auuuu...! pondré atención en... que sueño.

¡Buenas noches!


martes, 22 de septiembre de 2015

El Poli "Mono"





Si vas alguna vez a la ciudad "Ozoonoetina" seguramente te sorprenderás sobre la particularidad de sus habitantes. 

Por la mañana, podrás encontrarte caminando por la calle a Mamá Canguro; lleva a sus hijos a la escuela. En la acera del frente, Mamá Gallina camina aprisa y todos sus pollitos le siguen en fila india. Por el parque de la esquina observarás a Mamá Coneja; a cada hijo le ha dado una bolsa con semillas variadas, cereales y de postre unas zanahorias.

Los becerros, lechones, y terneros juegan fuera de la entrada mientras que sus madres platican antes de que suene el timbre del colegio. No te recomiendo que vayas a esa hora; el lugar está repleto.

En la calle están los Poli monos. Ellos son los encargados de dirigir el tránsito víal; el más importante es el Mono Tavo, parado en el poste del centro que funge la función de glorieta, atiende a los demás polimonos para que el tránsito vial pueda ser fluido.


La otra vez un elefante se quedó dormido. ¡Qué barbaridad!¡Imagina cómo tuvieron que hacerle para moverlo del lugar! Llamaron a Ela, la araña para que construyera una red en forma de camilla; luego entre varios caballos intentaron cargar esa red. Al ver que era imposible moverlo, buscaron un par de búfalos y a papá oso para que ellos ayudaran a empujar. Y bueno, entre todos lo llevaron a su hogar.

Al final de cuentas;  Papá elefante tuvo una gran multa y gracias a los varios poli monos no ocurrió un accidente. 

Definitivamente, Zoonoetina es una bella ciudad en la que todos los animales han aprendido a convivir de manera sana y se aprovecha al 100 por ciento las diferencias de cada individuo. 

Si de pura casualidad crees que te has perdido en el camino, no te preocupes; sabrás que has llegado cuando leas su letrero de bienvenida:

ZOONOETINA. 

¡El lugar donde nuestras diferencias complementan a la sociedad, bienvenido foráneo! 


¡Ven, acá te espero! 


¿listos?...

¡ B I E N V E N I D O S ! 




¡Bienvenidos al bosque de los sueños donde todas las realidades pueden parecer una divertida fantasía! 



Aquí podrás encontrar los mejores cuentos cortos para contar en la ocasión que gustes. Sólo basta conocer los derechos indiscutibles del lector: 

1º El derecho al delirio.


¿Qué tal si deliramos por un ratito? ¿Qué tal si clavamos los ojos más allá de la infamia para adivinar otro mundo posible?

    El aire estará limpio de todo veneno...
    En las calles, ¡los automóviles serán aplastados por los perros...!
    El televisor será tratado como la plancha o el lavarropas.


¡Se incorporará a los códigos penales el delito de estupidez que cometen quienes viven por tener o por ganar, en vez de vivir por vivir nomás, como canta el pájaro sin saber que canta y como juega el niño sin saber que juega!

Seremos imperfectos (porque la perfección seguirá siendo el aburrido privilegio de los dioses)...
¡Seremos capaces de vivir cada día como si fuera el primero y, cada noche como si fuera la última!

-Fragmento del discurso de Un niño llamado Lalo Galeano.


 2º El derecho al imaginario.


    Poder apropiarse de los bienes culturales -intangibles- con los cuales podamos crear horizontes para nuestra vida, sin intenciones de lucro.

3º  El derecho al descubrimiento y construcción de uno mismo.

    Siendo intermediarios los libros y autores que sean referentes del contexto social.

4º El derecho a la lectura sin restricciones que multipliquen las relaciones analíticas del texto; en conjunto con una lectura oral, grupal y/o individual.

5º El derecho al protagonismo del individuo dentro del desarrollo de su propia vida. 

     El individuo dejará de mirar y hablar sobre la vida de los demás de manera          negativa para poder ser el constructor de su propio camino. Aún cuando se             encuentre en contexto social desfavorecido.

6º El derecho indiscutible a la fantasía, a soñar y al conocimiento de su interior.

7º El derecho al relato; y la libre promoción de la palabra.

      Para su propia continuidad.

8º El derecho al viaje infinito que proporciona la lectura.

9º El derecho a tomar la palabra y la pluma.

10º El derecho a sentir el temblor sobre las seguridades que algunos autores puedan desatar en nuestros pensamientos, sentimientos y/o emociones. Un libro o lectura que puede llegar a hacer eso, vale la pena comentar con otro lector.

-Derechos basados gracias a la lectura de la Michèle y el Roger.